Reconstruccion del asesinato de spear y berry.

Un mar convertido en pueblo, gente de a pie, familiares, amigos,
artistas de la televisión, y medios de comunicación de varios países se
volcaron desde tempranas horas de ayer a las afueras de la funeraria
Monumental de Caracas. La dolorosa cita fue en los actos velatorios de
la actriz marabina y exreina de belleza, Mónica Spear, y su esposo
Henry T. Berry.
Las puertas de la capilla 6 se abrieron a partir de las 2:00 pm, y a esa
hora la fila era larga. En la sala velatoria se encuentran las dos urnas
(abiertas) de la pareja que fue asesinada en la carretera Puerto
Cabello-Valencia el lunes 6 de enero, suceso que conmocionó la
opinión nacional e internacional.
Sus familiares, tanto su padre, Rafael Spear, y su madre, Enna Mootz
de Spear, así como sus hermanos, Rafael Eduardo, Ricardo, Carolina y
Javier llegaron procedentes de EEUU. "El mensaje es muy claro.
Nuestro país tiene que cambiar, tenemos que acabar con esta
violencia, no es posible que en nuestro pueblo haya gente armada
como lo estamos y que estén matando inocentes como lo han hecho
con mis dos seres tan queridos", expresó Rafael Spear, papá de quien
fuera la Miss Venezuela 2004.
"Estamos viviendo fuera del país no solamente razones personales y
familiares, pero también por la inseguridad", agregó.
"Hemos perdido a una mujer que luchaba por ideales (…) Fue una gran
mujer y quiero que el mundo y el pueblo venezolano la recuerden
como un ícono. Le hago un llamado a las autoridades para que se
acabe la violencia", agregó Spear.
Aunque su padre fue el único dispuesto a declarar, el resto de los
familiares estuvieron a su lado. Mientras tanto, la fila de personas iba
avanzando para pasar a la capilla y acercarse a los féretros por escasos
segundos. La seguridad en el lugar es extrema y no se permite el uso
de cámaras fotográficas y TV a unos cuantos metros de distancia.
"Mónica parece una muñeca. Tenía un vestido estampado color fucsia.
El cabello del lado izquierdo con unas flores en la cabeza y maquillada
con la boca pintada de rojo intenso. Está hermosa en su ataúd", dijo
Alejandra Moreno, una ama de casa, quien llegó acompañada de sus
hijos y la abuela del hogar.